ELOGIO DE LAS BRUJAS
"La persecución
de las brujas fue una ofensiva sin precedentes, del sometimiento de las mujeres
al mandato de la reproducción y la aniquilación sistemática de las técnica de
reproducción .………………...De facto las Iglesias modernas de todas las confesiones,
con su intervención incondicional, en sí muy loable, a favor de la protección
de la vida, tanto del aún no nacido como la del nacido, desempeñaron la función
de auxiliares en la operación biopolítica más cínica de todos los
tiempos." Peter Sloterkijk
Las llamadas brujas,
eran mujeres sabias, emancipadas, solteras generalmente, con conocimientos
heredados de farmacia que conocían el poder de las hiervas y ejercían la medicina para sanar a la gente
que además de la función de comadronas y parteras también asistían en las necesidades de la contracepción y del
aborto (1).
Pero estas últimas
habilidades chocaron pronto con los planes demográficos del Estado y de las
Iglesias que a principios de nuestra era necesitaban gente para la guerra y
almas para Dios, y mas tarde en los inicios del capitalismo requerían aumentar
a cualquier coste la reserva de mano de
obra ya que eran productores de riqueza. Esta biopolítica tubo
consecuencias desastrosas en la demografía, que llegaron hasta nuestros días.
Dándose hoy la paradoja de tener exceso de mano de obra y una mayoría de
población envejecida.
Para impedir sus
actividades en el campo de la contracepción la Inquisición se valió de la
práctica de la tortura donde llegaban a confesar que volaban en escobas o se
apareaban con machos cabríos en el claro del bosque, aquelarres o que tenían
pactos con el diablo, etc.. La mitología
las ha representado feas y viejas con una gran nariz, caricaturas que han
llegado hasta nuestros días y que no tienen nada que ver con su auténtica
morfología.
La persecución de
las brujas duró tres siglos durante los cuales se llegaron a asesinar a cerca
de 200 mil mujeres y hombres en toda Europa.
(1) El aborto y la
contracepción nunca han dejado de ser objeto de control político, ya que se opone
a las necesidades del estado de cosificar a los seres humanos como materia
prima para todo tipo de uso. Y las Iglesias han sido en este aspecto
incondicionales pues su negocio también necesita de la sangre para prosperar.
Todo su discurso sobre el asesinato de los no nacidos no deja de tener un muy
alto interés para sus fines y una muy coja argumentación. Y mientras el cuerpo
de las mujeres como campo de batalla sigue siendo objeto de rapiña.
Mi querida amiga Lucía:
ResponderEliminarPor verdadera casualidad, me han llegado los últimos posts que has enviado a mis blogs, y ha sido porque ese maldito sistema de correo Outlook refleja no sé por qué todo lo que en ellos ocurre.
Pero sucede que los que giraban bajo jlpalazon1 y demás, se estropearon tampoco sé muy bien por qué y todo lo que se intenta colgar allí, ya no se logra.
Entonces, si no es demasiada molestia para ti, podrías intentar colgarlos en la nueva web, creo que se llama así:joselopezpalazon, tal como queda escrito, con minúsculas y sin acentos.
No me gustaría que uno sólo de tus comentarios se perdiera en la puñetera red.
Un beso,