domingo, 13 de octubre de 2013

CÓMPLICES Y VÍCTIMAS




 
Los silencios están hechos de oro y las palabras de plata, por eso hablar en plata es decir verdad.

La verdad no brilla hoy en las palabras de los políticos, la manipulación y retorcimiento del significado de las palabras son su forma de comunicar, han prostituido las palabras que eran los faros que guiaban las manifestaciones de la gente que se exponía y expone a los pies de los caballos de la represión.

Ellos, el gobierno y sus satélites, hablan de democracia, de libertad y de derechos, restándoles todo el inmenso valor que guardan en lo profundo de su semántica. Como en el cuento de Caperucita esconden la terrible sentencia: "para comerte mejor".

Nadie traduce para el común de la gente sus frases cargadas de intención. Los medios tienen hoy la autocensura elevada a la medida de sus deudas con el gran capital, que dirige escondido en los pliegues del anonimato todas las directrices que imponen una delgadez extrema a lo que no hace 5 años todavía era una sociedad desarrollada, activa e ilusionada.

Hay un factor que nunca le ha fallado al poder, se llama "miedo" y ese veneno lo administran en dosis letales cuya primera consecuencia es la inmovilidad y la incapacidad de defensa.

Desde la atalaya de sus medios de comunicación nos sirven todos los días declaraciones contradictorias y falsas, ora nos dicen que no se puede hacer otra política y tenemos que reducir mas nuestro nivel de vida, ora que estamos creciendo y que pronto saldremos de la crisis. Todo mentira.

Sin embargo la gente parece no ver el engaño, están atados a los hipnotizantes rayos catódicos capaz de atrofiar el sentido crítico, con lo que están dispuestos a votar una y otra vez a aquellos que les someten a la indigencia de una vida en blanco y negro. Cómplices necesarios y víctimas al fin.